martes, 1 de febrero de 2011

No imagino...



No imagino un placer mayor que el de susurrar tu nombre en la oscuridad, mientras mi polla se acerca a tu coño como un tigre acecha a su presa, despacio y en silencio.
No imagino otro paraíso que el de azotarte con mi fusta, sabiendo que el dolor no es más que la puerta y la antesala de un orgasmo infinito.
No imagino otro fuego que el de tu coño húmedo, abierto a mis caprichos, dispuesto día y noche a ser usado, a recibir mi semen como un cáliz sagrado.
No imagino otras ataduras que las tuyas, otros gemidos que los de mi perra sedienta y a la espera siempre, inquieta e ilusionada, del esperma de su Amo.
No imagino otras huellas que las de mi látigo en tu piel agradecida, ni otros dardos que los míos atravesando tu cuerpo.
No imagino mayor prenda que la de tu entrega, ni mayor gloria que la de sentirme deseado por mi perra…mi dulce perra.

1 comentario:

  1. Yo no imagino mi vida sin estar bajo Tu protección y Tu dominio...Porque nací para ser Tuya...

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